Con la participación de artistas de distintas procedencias, la exposición de la quinta Trienal del New Museum va más allá de los paradigmas establecidos para reflexionar sobre el momento actual

Samara Scott | Trienal 2021 del New Museum | StyleFeelFree
Vista de la instalación de Samara Scott | Trienal 2021 del New Museum: Soft Water Hard Stone | StyleFeelFree

El título de la exposición con la que se inaugura la quinta Trienal 2021 del New Museum de Nueva York, Soft Water Hard Stone, hace alusión a un proverbio brasileño. Água mole em pedra dura, tanto bate até que fura. Este se podría traducir como “agua blanda sobre piedra dura, tanto late hasta que perfora”. Si atendemos a su significación, se podría considerar que si uno persiste el tiempo suficiente puede lograr el efecto deseado. Por otro lado, también denota que el tiempo puede destruir incluso los materiales más resistentes. Mediante esta metáfora, este epígrafe habla de ideas de resiliencia y perseverancia. Así como del impacto que un gesto insistente, pero discreto, puede tener a lo largo del tiempo.

La Trienal 2021 del New Museum parte de una idea central. Considera que estamos en una época de cambios en los que las estructuras que antes se pensaban estables se empiezan a desintegrar. Por ello, reconoce a los artistas que reinventan modelos, materiales y técnicas tradicionales que van más allá de los paradigmas establecidos. Las obras que componen esta muestra exaltan estados de transformación de hasta cuarenta artistas de distintos países. En estas piezas se destacan factores como la maleabilidad de las estructuras, las superficies porosas e inestables o la adaptabilidad de los medios tecnológicos y orgánicos. Así, a lo largo de la exposición, los artistas abordan las capacidades regenerativas del mundo natural y nuestra inseparable relación con él. Al mismo tiempo, lidian con legados arraigados al colonialismo y la violencia. A través de sus reconfiguraciones y reinvenciones estos trabajos nos recuerdan nuestra temporalidad y adaptabilidad. Características fundamentales que compartimos y que hablan de nuestra humanidad.

Escombros, objetos, mutación e historias

Varios artistas que forman parte de la Trienal 2021 del New Museum, incluidos Ann Greene Kelly, Blair Saxon-Hill y Bronwyn Katz, recopilan y alteran los objetos encontrados. De esta forma, producen esculturas que trascienden la banalidad de su contenido. Otra de las creadoras, Samara Scott, transforma la fachada de vidrio del New Museum con una instalación compuesta de materiales orgánicos y escombros cotidianos. Estas exploraciones alquímicas las describe la propia artista como “mutación, podredumbre y cambio”. La modificación de los materiales dan como resultado abstracciones viscosas, capas y collages de líquidos, telas y bebidas energéticas. Por otro lado, la artista Nadie Belerique utiliza barriles de plástico que convierte en marcos individuales en los que exponer fotografías, líquidos y conjuntos de objetos vistos a través de un vidrio. El efecto del vidrio traslúcido y los barriles apilados se convierten en una pared porosa por la que mirar, existiendo simultáneamente un dentro y un fuera.

Otros artistas, como Angelika Loderer, Jes Fran e Iris Touliatou, presentan obras que cambian, se disuelven, decaen, transmutan y se desvanecen. En este sentido, Los relieves de las paredes de pasta de papel de Nickola Pottinger incorporan distintos elementos. Trozos de papel encontrados, partes rotas de obras anteriores, trozos de cerámicas, materiales orgánicos y dibujos. Por otro lado, la cerámica formada por collages y materiales naturales de Erin Jane Nelson, medita sobre la crisis climática en curso. Al mismo tiempo, las pinturas abstractas de Christina Pataialii sobre tela de algodón evocan cuestiones de clase y trabajo.
 

Trienal 2021 del New Museum | StyleFeelFree
Vista de sala en la Trienal 2021 del New Museum | StyleFeelFree
 

El papel del entorno para explorar nuestra corporeidad

Dentro de la Trienal 2021 del New Museum muchas obras interactúan directamente con la arquitectura de la galería, lo que afecta a la experiencia física del espectador con el espacio y los objetos que en él habitan. En su obra, la artista Laurie Kang reemplaza el típico panel de yeso —que se usa tradicionalmente en los museos— por rieles y postes de los que cuelgan películas fotográficas sin procesar. Estas películas son todavía sensibles, por lo que se transformarán con el tiempo. La relación entre la arquitectura y el cuerpo se retoma en muchas otras obras a lo largo de la muestra. De esta manera, los artistas retratan el entorno construido como una extensión de nuestra propia corporeidad.

El mensaje político de los espacios

Finalmente, las políticas de visibilidad y espacio social están representadas en vídeos, instalaciones y esculturas que examinan la herencia cultural y el papel de la historia y el estado en los sistemas de opresión. Por ejemplo, en la obra de Jeneen Frei Njootli se articula una dicotomía de ausencia y presencia. En ella, alude a la continua privación del derecho a voto y la violencia contra los pueblos indígenas de todo el mundo. A estos trabajos se unen la exploración especulativa sobre la negritud y la visibilidad en el vídeo de la artista Sandra Mujinga. Asimismo, la obra de Tanya Lukin Linklater reflexiona sobre los problemas de procedencia, las colecciones de los museos y las exposiciones museológicas. Sobre este análisis activa las pertenencias culturales indígenas almacenadas a través de la relación y el movimiento
 

DATOS DE INTERÉS
Título: Soft Water Hard Stone
Artistas: varios
Comisariado: Margot Norton y Jamillah James
Lugar: New Museum, Nueva York
Fechas: 28 de octubre de 2021 al 23 de enero de 2022
Horarios y tarifas: consultar