Rebeca Vicente
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La decimotercera edición de JUSTMAD continúa su marcha con un programa que acerca el coleccionismo a todo amante del arte contemporáneo sin importar el estatus

Isabel Flores | JUSTMAD 2022 | StyleFeelFree
Obras de Isabel Flores en el espacio de Galería Beatriz Pereira en JUSTMAD 2022 | Foto: Rocío Antolín | StyleFeelFree

Un año más, Madrid se convierte en la capital del arte contemporáneo para abrazar a coleccionistas y galerías nacionales e internacionales. La feria JUSTMAD 2022 que abrió sus puertas en el Palacio de Neptuno el pasado 24 de febrero vuelve un año más a celebrar esta gran fiesta cultural. Aquí, la música, la diversión y, cómo no, el arte, se dan cabida en este maravilloso espacio en pleno núcleo artístico madrileño. En esta decimotercera edición, la sostenibilidad, la ecología y el feminismo siguen siendo los ejes imprescindibles de su programación. Por supuesto, esta entrega también constata el creciente número de jóvenes creadores y nuevas promesas. Y es que la producción joven llama la atención por su frescura y determinación, además de por sus estilos rompedores e impactantes.

Pero JUSTMAD también quiere acercar el arte a personas que no se pueden permitir una gran obra por su precio. Es por ello que la feria centra su foco en dar visibilidad a autores que acaban de empezar en este mundo. Creadores como Kaufman, que acude a la muestra de la mano de la juguetería suiza Geomag. Su serie Modular se inspira en el adoquinado de la ciudad y sus figuras intercambiables dan la posibilidad de crear infinitas combinaciones. Asimismo, también se presenta la obra de alumnos recién graduados de la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid mediante el programa Emerge Bellas Artes. Es el caso de Isabel Merchante, que trabaja con “la convivencia del ser humano con lo irreal”, según apunta la propia artista. Su serie fotográfica, Raccord Notes, habla de esos fallos de montaje en las películas con objetos que añade en estos escenarios.

Un fantástico mundo interior

Es común que los creadores vuelquen todas sus inquietudes en la pieza que están creando. El arte son sentimientos o pensamientos que salen de lo los más profundo del creador. A su vez, es una forma de expresar su mundo interior. Así es como lo hace la artista Abi Castillo. A través de su serie de cerámicas Drama, transmite sus emociones más profundas. Son autorretratos donde el drama o el dolor se ven personificados en esa cara tan característica que inunda su obra. La delicadeza con la que cuida su producción hace que el espectador pueda recibir esas impresiones de forma suave, nada violenta ni desagradable. María Magán, galerista de La Doce, es la encargada de abrirnos las puertas del jardín propio de Abi Castillo. Además, la galería también trae a JUSTMAD el pintor David Fidalgo Omil, quien, a través de memes, busca esa crítica de la cultura popular.

Los artistas quieren hacer sentir al espectador lo que ellos sienten. Paseando por el Palacio de Neptuno te topas con Di Gallery, la galería que, orgullosa, presenta a Little. Su forma de expresarse mediante sus ilustraciones le hacen ser único. Plasma su interior, sus experiencias y sus emociones con dibujos y frases como “yo tengo miedo a mí mismo, tengo miedo a mis propios monstruos”. De esta forma, une la literatura y el dibujo para completar el mensaje. Su línea dubitativa, sensible y frágil, pero a la vez decidida, hace de su composición una pieza excelente. Asimismo, Little se mueve por la cotidianidad, y utiliza la imagen del gato para reflejar su personalidad. El gato es un animal independiente, pero a la vez cariñoso, como él. Igualmente, su obra en papel se extiende a la cerámica, colaborando con otros profesionales artesanos locales para apoyar el entramado cultural nacional.

De lo tradicional a lo contemporáneo

El arte es una herramienta que permite al autor transformar elementos cotidianos o tradicionales en piezas únicas y contemporáneas. Elementos que suelen pasar desapercibidos ante nuestros ojos, se convierten en obras de vanguardia. Esta práctica, casi mágica, es la que podemos ver en la artista Tamara García, respaldada por la galería Art Concept Alternative. Su serie, Vestida, representa a las mujeres entre los años 1950 y 1975 mediante los estampados de sus batas. Estas vestimentas constituían su uniforme de casa, pero también de trabajo como trabajadoras domésticas o cuidadoras. Su objetivo con esta serie es la de recuperar esos estampados para centrar la atención en la labor que ejercían esas mujeres. Silvia Medina, galerista de Art Concept Alternative, afirma que estas obras son “una oportunidad para personas que no tienen tantos recursos” para adquirir una obra de esta galardonada artista.

De la misma forma que Tamara García, la Galería Beatriz Pereira acude a la feria con la artista Isabel Flores. Su tema principal es el ornamento en serigrafía sobre tela. Su objetivo es traer elementos tradicionales a un soporte más contemporáneo mediante una abstracción de la forma ornamental. Ahora ha dado un salto a la cerámica y la forja, mezclando la tela con el hierro forjado. Flores obtiene su inspiración principalmente de los elementos decorativos que pudo observar durante su estancia en Turquía. Otra gran influencia en su obra es la casa de su abuela en Hornachos, Badajoz, y sus azulejos. Es esa sensación de hogar la que pretende transmitir mediante sus confecciones artísticas. Así, extrae de elementos cotidianos algo más actual. Como apunta Beatriz Pereira, “lucha contra la idea de que lo ornamental no es arte”. Junto a ella, la galería también nos acerca a Virginia Rivas.