La artista Carla Cañellas, en la galería de Arte A Ciegas, une los grabados de Francisco de Goya con la serie de animación Dragon Ball en un diálogo que saca a la luz problemas sociales

Carla Cañellas | Galería de Arte a Ciegas | StyleFeelFree
Obra: Goya vive, la lucha sigue (Serie Caprichos) © Carla Cañellas | StyleFeelFree

Es preciso reflexionar sobre los riesgos que se han de tomar en la vida si queremos obtener grandes cosas. Al menos esta acepción puede servir de conexión entre el ilustre pintor y grabador Francisco de Goya y el anime Dragon Ball. La artista Carla Cañellas (Valencia, 1982) fusiona en la exposición Goya vive, la lucha sigue los trabajos de ambos referentes. Con esta labor, crea un diálogo entre la cultura occidental y la oriental. Asimismo, mediante dibujos de tinta sobre diferentes soportes de papel que mezclan estilos dispares, une estos dos mundos en una conversación común. Una revisión de la obra del autor a través de la serie Bola de dragón que ahora inunda la Galería de Arte A Ciegas de Madrid. De esta forma, Cañellas cuenta cómo nuestro tiempo se refiere casi a las mismas cuestiones que tuvieron lugar hace 275 años.

Carla Cañellas sitúa su actividad en la construcción de la identidad en diferentes contextos sociales. Para ello, investiga especialmente los escenarios manipulados por lo que se podría llamar ingeniería social. Como resultado, explora el ejercicio artístico a través de una labor de cuestionamiento, crítica, educación y transformación de la sociedad. Es por esta razón por la que su trabajo se interesa en el retrato identitario creado a partir de un diálogo con el espectador. De hecho, la artista publicó su primer libro, Detenidos, sobre las consecuencias de la crisis económica en la sociedad española acompañado de un anexo educativo/didáctico.

Goya y Goku en conversación

El tema social de la obra de Francisco de Goya supone la base del trabajo de Cañellas. No obstante, la impresión inicial que se produce en el espectador es la de estar frente a los personajes de la animación del manga nipón. A la vez que el imaginario reproduce su melodía, emerge el recuerdo de la fuerza, la superación, lo divertido y el toque kawaii o adorable. Y es que Goku podría ser un buen ejemplo del soft power (poder blando) de la superpotencia cultural que es Japón. Este poder de influencia que tiene el protagonista de Dragon Ball puede hacer llegar el mensaje a un gran público.

Carla Cañellas combina en su obra la influencia goyesca con la del personaje Goku a través de la técnica suibokuga o sumi-e. Esta práctica corresponde al arte japonés de la pintura a la tinta. En sus creaciones, las imágenes de la serie japonesa de los años noventa ocupan el plano principal. Con un trazo sublime a tinta china sobre papel washi, la artista esconde diferentes capas de realidad. De este modo, poco a poco se va vislumbrando la influencia del pintor aragonés. Cañellas reinterpreta así composiciones magnas de Goya, como Los Caprichos o Cartones para las Estancias Reales, como una forma de crítica sociopolítica contemporánea. Su interpretación encuentra una continuidad al juicio pictórico del pintor sobre situaciones actuales en las que interviene la Ley mordaza. Como resultado, la espiral del “eterno retorno” de la historia conecta las incongruencias e injusticias del pasado con las del presente.

Sarcasmo como herramienta de lucha social

Históricamente, los creadores han buscado diferentes recursos para plantear temas de su contemporaneidad. Uno de los pioneros en tratar aquellas situaciones que podían resultar incómodas o sometidas a censura fue Francisco de Goya. A través de sus trabajos, ejerció de cronista realizando un análisis de la situación del país. Durante esa época, en España existían diferentes grupos culturales con necesidades de ascensión social. Esto los llevaba a entrar en disputa con las estructuras más reaccionarias artífices del estancamiento nacional. Por ello, la actitud del artista comportaba ciertos riesgos debido a la vigilancia que ejercía sobre él la Inquisición. La sátira y su carácter socarrón fueron fundamentales para que, a modo de reportero de la época, denunciase las duras condiciones de la sociedad española. Por otro lado, Toriyama Akira, creador de Dragon Ball, también usa la ironía para transmitir la historia original del Viaje al oeste.

Al igual que Goya, que acompañaba sus imágenes de textos cortos a modo de proverbio japonés, Carla Cañellas hace uso de frases breves. En ellas se puede ver una reflexión sobre el trasfondo de la situación actual, como en el uso de periódicos encolados simulando cartones o anuncios actuales. O como aquellas directrices que daban al maestro para la confección de la obra, o de las propias conclusiones que sacaba. Casi doscientos años después de su muerte, Goya vive, la lucha sigue. Un lema que recuerdan los comisarios Alejandra Rodríguez Cunchillos y Mario Malo Sanz, que han sido los responsables de llevar a cabo este proyecto.
 

DATOS DE INTERÉS DE LA EXPOSICIÓN

Título: Goya vive, la lucha sigue
Artista: Carla Cañellas
Comisariado: Alejandra Rodríguez Cunchillos y Mario Malo Sanz
Lugar: Galería de Arte a Ciegas, Madrid
Fechas: Del 3 de febrero al 1 de abril de 2022
Horarios y dirección: consultar