Alma mater | La mujer en la guerra de Siria 

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Rosana G. Alonso

Alma mater de SFF. Librepensadora observando las dinámicas sociales y culturales desde una perspectiva feminista que se abre a lxs otrxs

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En ‘Alma mater’ el belga Philippe Van Leeuw aborda la cuestión femenina en el conflicto sirio, una cinta que reformula las películas de guerra

Básicamente hay dos formas de retratar la guerra. Destacando su maquinaria destructiva donde la bestia surge aniquilando todo a su paso, o incidiendo en lo humano, repleto de individuos (no máquinas de matar) atrapados en lo bélico que sobreviven creando lazos de solidaridad. Philippe van Leeuw ha elegido el segundo camino en Alma mater, una película que esboza la contienda en Siria interiorizando en la vulnerabilidad del ser humano amenazado. Esto lo concibe el cineasta belga situando a sus personajes en un espacio confinado, el interior de una vivienda en un edificio abandonado, en el que una familia y una pareja joven con su hijo recién nacido conviven, bajo la mirada pragmática de una mujer, Oum Yazan, interpretada contundentemente por Hiam Abbas, que custodia el recinto. Recurso también utilizado con la misma fuerza expresiva en Clash de Mohamed Diab, en este caso, con la acción transcurriendo dentro de un furgón policial. Como en la cinta egipcia, Alma mater cerca el ángulo, cámara en mano, que enfatiza la visión del ojo humano permitiendo acercarse a su realidad comprometida por el peligro. Aunque aquí no hay tanta sensación de claustrofobia transigiendo con cierta fluidez, salvo en algunas escenas especialmente dramáticas para las que se acorta el prisma de acción, como espectadores sentimos que somos unos privilegiados a salvo de un peligro inminente al que cerramos los ojos, lo cual nos lleva a hacer lecturas paralelas al guion, que nos invitan a reflexionar sobre el drama de los refugiados como bien retrató Ai Weiwei en Marea humana.

Al margen de este análisis, hay otra razón de peso en Alma mater que la convierte en una película notable al reformular los filmes de guerra. Generalmente los conflictos armados están representados por lo masculino que batalla a vida o muerte por uno de los bandos enfrentados. En esta ocasión, sin embargo, es la mujer el centro de atención en un país de autoridad masculina. Sobre ella recae el peso de la unidad y la protección de los más débiles, los niños y los ancianos que sin ser protagonistas dan sentido a la trama aligerando la catástrofe. Mujeres que son pilar fundamental sobre el que se mantiene en pie una Siria devastada, simbolizada por la actriz Diamand Bou Abboud en una escena brutal, y por lo tanto objetivo del enemigo, que busca minar la autoestima de su contrario, destruyendo el fuego que custodian sus vestales, en un Estado sabidamente patriarcal y con grandes desigualdades de género. En este sentido, la cinta de van Leeuw aporta magnitud y frescura a lo bélico, adentrándose en lo doméstico para a través de ahí enfatizar la espera, la incertidumbre, la esperanza, el dolor y el afán de supervivencia en un medio hostil que quiere, a través de los mafiosos que proliferan en toda beligerancia, precisamente acabar con esa fortaleza y esperanza.
 

Tráiler de Alma mater | StyleFeelFree Youtube