Tom of Finland | Construyendo identidades 

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Rosana G. Alonso

Alma mater de SFF. Librepensadora observando las dinámicas sociales y culturales desde una perspectiva feminista que se abre a lxs otrxs

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La estética que marcó el dibujante ‘Tom of Finland’ sigue asociada hoy en día al imaginario de la cultura gay, por ello la película es un tributo a su figura

Hay todo un ideario estético en la cultura gay que tenemos asociado a ciertas imágenes eróticas icónicas como los hombres vestidos de cuero con gorra y bigote, entre los que destacaban motoristas y policías. Aunque estas imágenes con el tiempo se han convertido en un estereotipo de dicha cultura, en su momento, contribuyeron a liberar al hombre homosexual de prejuicios, en una época, especialmente los cincuenta y los sesenta, en la que salir del armario, ni tan siquiera en el mundo occidental era una opción.

Lo que es menos conocido es que toda esa estética, determinante en la lucha por la libertad sexual, se debe al artista finlandés Touko Laaksonen, que a partir de 1957, comenzó a publicar sus dibujos homoeróticos en la publicación norteamericana Physique Pictorial bajo el seudónimo de Tom of Finland, influyendo en artistas como Robert Mapplethorpe. Un punto de arranque, finales de los cincuenta, que daría pie a que en las décadas de los sesenta y setenta los movimientos contraculturales tuvieran un gran apogeo contribuyendo a crear identidades como las que retrató también el alemán Karlheinz Weinberger, un fotógrafo cuya obra ahora puede verse en la exposición comisariada por Alberto García-Alix en el Museo Nacional del Romanticismo.

En esta construcción de identidades la figura de Tom of Finland es fundamental. Un artista que se recupera en la película dirigida por Dome Karukoski revelando la trayectoria del finlandés en un trazado que trata de incorporar todos los aspectos del movimiento gay, en un relato diáfano que comienza durante la Segunda Guerra Mundial y finaliza en los noventa, después de atravesar muchos escollos en la larga lucha por las libertades sexuales. Estos escollos contemplan, entre otros, el varapalo que en este camino supuso la llegada del SIDA en los ochenta, cuando la orientación sexual hacia personas del mismo sexo en los EEUU estaba comenzando a tener un importante auge y aceptación.

La historia de Tom of Finland está bien desarrollada con un guion que trata de huir de las estandarizaciones y avanza con ritmo por un relato que abarca muchos aspectos, resultando un importante eslabón en esa lucha por la libertad sexual que a día de hoy, a pesar de los pasos de gigante que el movimiento de LGTB dio en el siglo XXI con la entrada en vigor del matrimonio entre personas del mismo sexo en muchos países, parece condenada a las polarizaciones y la llamada del hiperconsumo.
 

Tráiler de Tom of Finland | StyleFeelFree Youtube