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El trabajo analítico que Miquel Mont ha ejecutado sobre la pintura, queda latente en la exposición ‘Nunca es suficiente’ que acoge la Fundació Suñol
Miquel Mont (Barcelona, 1963 – Paris) continúa la tradición francesa que a finales de los sesenta impulsaron colectivos como BMTP y Supports-Surfaces, reivindicando una supervivencia de la pintura como soporte y realidad material, que rechazaba, al mismo tiempo, la figuración narrativa. Esta percepción de madurez a la que se asoma ya instalado en París desde 1988, reinvierte su primera idea de la abstracción como lenguaje codificado que suponía una desaparición de la dicotomía figuración-abstracción.
Ahora, su trabajo analítico de la pintura se recoge en la exposición Nunca es suficiente en la Fundació Suñol, como parte del interés que Josep Suñol mostró ya en los noventa por la obra de artistas catalanes emergentes, como era el caso de Miquel Mont. La muestra monográfica que nos ocupa, surge de aquel primer interés del empresario por el trabajo de Mont, pero está focalizada en la producción más reciente del artista, con obras realizadas entre 2007 y 2014 organizadas en cuatro ámbitos que se corresponden a las cuatro series presentadas: Cooperaciones, Lapsus, Mono-Tones y Collages ideológicos.
Si en las obras que el artista realizó en los 80 y los 90 trabajaba la pintura desde su densidad, hasta convertir las piezas en una aproximación tridimensional, sus trabajos posteriores _ entre los que se encuentran la selección de piezas presentadas en esta exposición _ aumentan su superficie y se funden en el espacio. Así, en las obras de la serie Lapsus, desvincula pintura y soporte. Aquí se contemplan figuras geométricas de proporciones humanas realizadas con materiales industriales como el pladur o el DM que evidencian la rudeza y la economía de medios característica en la obra de Mont. Estas se presentan junto a superficies de iguales medidas pintadas en la pared. Vemos como la pintura adquiere vida propia independizándose de la base que la sustenta y trasladándose directamente a las paredes de la sala. En cambio, en la serie Cooperaciones el gesto del artista se evidencia en la aplicación de capas superpuestas. Los Mono-Tones por su parte, se reafirman como formas sin contenido —en palabras del autor—, mientras que los Collages ideológicos se muestran cargados de una dimensión ambigüa que necesita de la intervención del espectador para descifrar su carga ideológica y matérica.
Título: Nunca es suficiente
Artista: Miquel Mont
Lugar: Fundació Suñol – Barcelona
Fechas: 12 de febrero de 2015 – 25 de abril de 2015